Baterías de silicio de carbono, lo nuevo en smartphones

Ventajas que mejoran la experiencia de los usuarios.

En la última década, los smartphones han experimentado desarrollos significativos, evolucionando para suplir diferentes necesidades de los usuarios. Desde pantallas más grandes, cámaras de alta calidad, amplias capacidades de almacenamiento e incluso herramientas impulsadas por Inteligencia Artificial, han transformado la experiencia móvil. Sin embargo, a pesar de todos estos avances, existe un desafío que persiste: la autonomía de las baterías.

Las baterías de silicio-carbono son una evolución de las tradicionales baterías de iones de litio. A diferencia de estas últimas, que utilizan grafito en el ánodo (material que permite guardar una cantidad limitada de iones de litio durante la carga), estas nuevas tecnologías incorporan silicio, lo que posibilita almacenar más energía en menor espacio.

Esto se traduce en una mayor capacidad de batería sin necesidad de aumentar el tamaño del dispositivo. Además, el silicio optimiza la eficiencia en la gestión energética, permitiendo tiempos de carga más rápidos y una durabilidad superior.

Esta tecnología comenzó a implementarse comercialmente en el sector automotor en 2016, y en la industria tecnológica, HONOR se posicionó como pionera al presentar, durante el Mobile World Congress (MWC) 2023, el primer dispositivo equipado con baterías de silicio-carbono. Este lanzamiento marcó un hito en la mejora de la autonomía y el rendimiento energético de los teléfonos móviles.

Teniendo en cuenta esto, la marca menciona algunas de las ventajas clave de estas baterías que están transformando el uso de los smartphones:

Mayor densidad energética: Las baterías de silicio-carbono pueden almacenar más energía en un espacio reducido en comparación con las baterías de iones de litio. Esto no solo permite la creación de dispositivos más delgados, sino que también ofrece la posibilidad de incorporar baterías con mayor capacidad de miliamperaje (mAh).

Mayor duración: gracias a su densidad energética, estas baterías pueden aumentar la autonomía entre un 20% y un 40%. Esto significa más horas de uso para smartphones, tablets y otros equipos electrónicos.

Larga vida útil: por otro lado, estas baterías tienen una vida útil más larga debido a que puede soportar más ciclos de carga y descarga (un ciclo completo se define como la carga desde el 0% hasta el 100%). Esto reduce la necesidad de reemplazos frecuentes, lo que es beneficioso tanto para los usuarios como para el medio ambiente.

Batería al 100% en minutos: estas baterías también ofrecen la ventaja de disminuir los tiempos de carga. Gracias a su capacidad para almacenar más energía en un período más corto, facilitan una carga rápida más eficiente, lo que es fundamental para las personas que dependen de sus dispositivos a lo largo del día.

Riesgos reducidos: por último, estas presentan importantes beneficios en términos de seguridad. Desde un punto de vista físico, son menos inflamables y tienen una menor propensión a sufrir explosiones en comparación con las baterías de iones de litio.